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2024-07-29

Dos veces en ventaja y
lo terminó perdiendo


Liniers fue una “Topadora” en el
final y se quedó con la victoria



LUCIANO MAIDANA , de aceptable labor, se lleva el balón perseguido por Emiliano Varela. Los Andes volvió a pagar muy caro su obsesión por defender cuando esta ganando. Foto: Prensa de Los Andes.

Por Alberto Rincón

Los Andes sumó su tercera derrota consecutiva al perder frente a Liniers por 3 a 2 tras estar dos veces en ventaja en un partido muy luchado donde el local capitalizó en los minutos finales el habitual repliegue del equipo lomense cuando se halla en ventaja. Los Andes fue muy efectivo en la primera parte donde llegó tres veces y convirtió dos goles (Maidana y Kestler) , en tanto el local había logrado una transitoria igualdad a través de Linas.  En el inicio del complemento las imprecisiones de Liniers  le posibilitaron al equipo de Ruiz no pasar muchos sobresaltos hasta que en los veinte minutos finales se acentuó el dominio local que generó numerosas situaciones de gol, logrando dar vuelta el marcador con los tantos de Santiago Martínez y el ingresado Franco Romero.

Parece que Los Andes no aprende más, que no entiende que cuando está ganando es más negocio defenderse con la pelota que refugiándose contra su arco, que apuesta todo a aguantar  y contar con la ayuda de las limitaciones de sus rivales y no tiene en cuenta sus propias falencias que quedan al desnudo cuando es atacado y se abren grietas en toda su retaguardia. Definitivamente, a Los Andes le hace mal ir ganando, porque cuando eso sucede da la sensación que está mentalizado nada más que para defender y se olvida de jugar. Dos veces estuvo en ventaja mostrando una efectividad admirable pero así y todo lo echó a perder en los últimos 20’ donde Linieres, tal como lo apodan, fue una  “Topadora” que se lo llevó por delante y se quedó festejando una victoria inolvidable.

Por primera vez Los Andes visitaba el estadio Juan Antonio Arias en La Matanza, donde fuimos sorprendidos no solo por la amabilidad de la gente local sino también por encontrarnos con un campo de juego de amplias dimensiones, aunque su estado no fuera el mejor. Nos imaginábamos que Los Andes se vería favorecido por ello, pero con el transcurrir del partido volvimos a ver un equipo confundido, impreciso, con pocas ideas (sólo la inteligencia a cuentagotas de Torres), pero con una efectividad digna de elogio. Llegó tres veces en la primera etapa. A los 8’ tras un lateral de Carrasco, el centro de atrás de Gallegos y Luciano Maidana empujando al gol : 1 a 0 . Después, a los 12’ centro de Carrasco y el cabezazo de Kestler que se fue apenas alto por sobre el travesaño y a los 43’ la combinación de Maidana y Torres por izquierda, el centro con precisión de este último, la aparición de Carrasco para cabecear casi en el área chica, el arquero tapó dando rebote y entonces Kestler, a la expectativa apareció para marcar el 2 a 1 .

Liniers fue un duro rival siempre. Ya al minuto pudo ponerse en ventaja pero Canavesio rechazó sobre la línea. Empujado desde el fondo por el veterano Sebastián Martínez, las apariciones de Reynoso y principalmente el excelente trabajo de sus delanteros Matías Linas  e Ignacio Sallaberry tuvo mayor control del juego. Un error de Gastón Martínez provocó un remate apenas desviado de Varela y finalmente sobre los 33’ Linas ,tras un centro de Sallaberry, ( luego que Sebastian Martínez recuperara el balón en el medio ante Federico Martínez ) , no llegó a interceptar Canavesio, tomó el balón y desde ángulo muy cerrado sorprendió a todos y en vez de enviar el centro atrás, remató al arco, el balón paso entre el primer palo y el arquero, pegó en el otro palo y terminó dentro del arco.

Con el empate el partido se volvió a equilibrar pero ya en el segundo tiempo, con Los Andes otra vez en ventaja, volvió a ocurrir lo de siempre. El retraso de las líneas, aguantar en su campo y especular con que se pueda producir algun contragolpe, que sucedió sobre el cuarto de hora cuando robó Cañete en el medio ,la contra con ventaja numérica (eran tres contra dos) el pase a Federico Martínez a la izquierda que optó por rematar al arco sin dirección, cuando por el otro sector esperaba muy libre Kestler la habilitación. Hubiera sido el 3 a 1 y la historia quedaba liquidada, aunque no se puede hacer conjeturas sobre algo que no sucedió.

Lo que sí sucedió es que Liniers volvió a reaccionar y de la mano del imparable Sallaberry,  volvió a generar acciones de riesgo. A los 25’ el travesaño devolvió un remate de Sallaberry, un minuto después fue el poste izquierdo de López el que devolvió el remate envenenado de Linas y tras cartón remató Varela y López llegó justo para desviar al corner. Tres claras oportunidades en apenas dos minutos y Los merecimietnos del local que finalmente tuvieron su premio a los 28’ tras un tiro de esquina de Varela, el rechazo de cabeza de Segalerba y la aparición de Sebastián Martínez para sacar un remate formidable y muy preciso que se metió abajo, junto al palo derecho de López.

Y con el 2 a 2 pareció despertarse Los Andes que se volvió a acordar del arco rival y metió un par de centros peligrosos que no concretó. El partido se hizo de ida y vuelta y un pelotazo largo que Maidana rechazo de cabeza en forma corta, Linas combinó con Di Motta, el centro al área y otra vez apareció Sallaberry para habilitar a Franco Romero cuyo remate bajo y cruzado, bastante débil, pasó entre las manos de López y se metió en el arco  

Un resultado un tanto inesperado pero absolutamente merecido por el local, y que sólo se puede explicar porque  esta forma de jugar que ha adoptado Los Andes  no puede asegurar ningún éxito hasta el pitazo final. Muchas veces, en el torneo anterior, logró concretar esos triunfos que le dieron el primer puesto. Ahora parece ser que ni siquiera con el travesaño y los palos a su favor, Los Andes puede concretar resultados positivos y termina sumido en la impotencia y la desesperación en los minutos finales cuando ve que se queda con las manos vacías por su propia mezquindad futbolística.